Durante tres décadas, Genghis Khan y su ejército estuvieron constantemente en guerra y siempre en movimiento, dejando millones de muertos a su paso.
Entre los ejércitos conquistadores hay muchos logros, dos de los cuales destacan especialmente.
- Nunca perdieron una sola batalla
- Nunca usaron la misma estrategia dos veces.
La incomparable capacidad del ejército para evolucionar y adaptarse lo convierte en una de las organizaciones de aprendizaje más extraordinarias del mundo en la historia de la humanidad. ¿Pero cómo lograron esto? En primer lugar, Genghis estaba obsesionado con adquirir nuevos conocimientos. Después de cada batalla, buscaba ingenieros, científicos y artesanos entre el pueblo conquistado y los integraba en su ejército.
Cuando se utilizó una nueva tecnología contra los mongoles, esos ingenieros aprendieron cómo se construyó para poder usarla en la siguiente batalla. Igualmente importante fue la agilidad del ejército de Khan. Mientras sus enemigos arrastraban equipo pesado en interminables trenes de suministros, Genghis solo traería sus ingenieros, sus caballos y su experiencia. Cuando llegaran a un nuevo territorio, sus ingenieros encontrarían los mejores materiales locales y construirían sus armas a gran escala allí mismo. Esto les permitió adaptarse rápidamente y a la situación sobre el terreno. También le permitió a Genghis moverse con fluidez y rapidez y solo detenerse para construir su arsenal cuando era el momento exacto. El efecto fue a la vez extraordinario y aterrador.
A través del constante aprendizaje y adaptación, Genghis cambió las reglas de la guerra. Construyó el imperio contiguo más grande que el mundo haya conocido. Fue responsable de la muerte de hasta 40 millones de personas.
De todas las historias que rodean la vida del "Gran Khan", quizás la más famosa sea cómo terminó. Realmente no se sabe. La narrativa tradicional dice que murió en 1227 a causa de las heridas sufridas al caer de un caballo, pero otras fuentes enumeran todo, desde malaria hasta una herida de flecha en la rodilla. Uno de los relatos más cuestionables incluso afirma que fue asesinado mientras intentaba forzar a una princesa china. ¡Vaya!
Un siglo después, el poderoso imperio de Genghis Khan comenzó a desmoronarse. Eso no quita que su reputación lo haya convertido en uno de los inmortales de la historia. Una reputación aún más realzada por el misterio de su entierro. Se dice que todos los testigos de su cortejo fúnebre fueron ejecutados para mantener en secreto la vista de la tumba. Incluso hoy en día el lugar del enterramiento sigue sin descubrirse. No hay tumba, ni tumba, nada para el comandante militar más exitoso que el mundo haya conocido.
“Conquistar el mundo a caballo es fácil; lo difícil es desmontar y gobernar”.